El casco urbano de Granada, el río Darro, la Alhambra y Sierra Nevada enmarcan este parque periurbano. Desde sus áreas recreativas, Llano de la Perdiz y Aljibe de Lluvia, el ciudadano disfrutará de inmejorables vistas de este entorno, siendo muy recomendable la que se presenta desde el mirador de la Silla del Moro.
Respecto a su vegetación, predominan especies mediterráneas como la encina, el pino de repoblación y algunos ejemplares de quejigos, junto al que se encuentra un abundante matorral de especies aromáticas. Entre su masa boscosa habita un gran número de especies animales, destacando las aves forestales. Los senderos Quejigal del Darro y Barranco de la Silla del Moro, junto al carril cicloturístico de la Acequia del Real, permiten conocer de primera mano esta interesante riqueza natural. Los nombres de las instalaciones y equipamientos nos dan idea del calado histórico de la Dehesa del Generalife. Restos palaciegos, aljibes y acequias de agua son pruebas de su importante pasado árabe.
Pero también en el parque periurbano hay espacio para el ocio y el deporte. El sendero Circuito Deportivo plantea un reto a los visitantes más atléticos.
Las opciones para el visitante no terminan aquí, teniendo la posibilidad de continuar en contacto con la naturaleza en los Parques Naturales de Sierra Nevada o Sierra de Huétor, así como realizar la visita ineludible a la ciudad de Granada. En la capital destaca el conjunto formado por la Alhambra, el Generalife y el Albaicín declarado Patrimonio de la Humanidad; cada rincón de Granada es un lugar repleto de historia y leyenda.